Conseguir tener una casa limpia y ordenada puede resultar una tarea complicada. Pero nada más lejos de la realidad. Con una buena rutina diaria no es complicado de conseguir. Pero, ¿cómo conseguir una casa limpia y en orden? Lo ideal es crear una serie de rutinas y hábitos que te ayuden a mantener el orden sin volverte loca. Sigue estos pasos y verás cómo, en pocos días, habrás interiorizado las rutinas que te resulta mucho más sencillo conseguir que tu casa se mantenga ordenada por más tiempo. Estas son las rutinas de limpieza y orden que deberás seguir:

RUTINAS

1.- Haz la cama según te levantas

Entrar en una habitación con la cama sin hacer o mal hecha suele dar mala imagen. Por lo que hacer la cama según te levantas es uno de los consejos básicos del orden. Llevar a cabo este consejo tiene muchos beneficios: potenciar tu autoestima o reducir el estrés, entre otros. Pero lo mejor es que, cuando vuelvas del trabajo la sensación de orden te invadirá y sentirás que tu habitación es mucho más acogedora e invitará al descanso. Además, dormir con la cama sin hacer repercute negativamente en tu descanso, llegando a provocar tortícolis o contracturas en la espalda.   

2.- Friega los platos después de cada comida

La tarea de fregar, muchas veces, nos da pereza. Pero hacerlo después de cada comida y cena hará que evitemos que la suciedad se incustre en los platos y que sea más difícil limpiarlos. También nos ayudará a prevenir los malos olores y las bacterias. Además, así evitaremos que la pila de platos se haga cada vez más grande. Destierra la pereza y, según termines de comer, recoge los platos y friégalos o mételos en el lavavajillas.

3.- Guarda las cosas después de cada uso

Regla número uno del orden: recoge algo cada vez que lo uses. Si usas algo, devuélvelo a su sitio cuando hayas terminado de usarlo. Nos puede dar pereza o resultar algo tedioso, sobre todo cuando estamos metidos en faena, pero es una rutina que te ayudará a mantener tu casa ordenada en todo momento y, lo mejor de todo, libre de objetos fuera de lugar.

4.- Repasa el baño después de la ducha

No se trata de realizar una limpieza profunda como cuando haces una limpieza general. Pero sí de aprovechar que usamos el baño para colocar las toallas, eliminar las posibles manchas de pasta de dientes del lavabo o pasar un paño rápido por la mampara para eliminar la cal. Además, de esta manera, adelantarás el trabajo para cuando limpies el baño a fondo y te dará menos pereza.

5.- Recoge la ropa

Normalmente, cuando llegamos a casa, nos desvestimos y dejamos la ropa tirada por ahí. Solemos llegar cansados, después de un día de trabajo fuera de casa y lo último que nos apetece es ponernos a recoger y a ordenar la ropa. Pero dejar tirada la ropa encima de la butaca, la silla o la cama no nos va a ayudar en nuestras tareas de limpieza y orden. Lo ideal sería echar en en un cubo de ropa sucia aquellas prendas que necesiten ser lavadas, mientras que prendas como los vaqueros, las chaquetas o el jersey, que puedan utilizarse varias veces más, las guardemos.

 

Si no quieres poner en práctica estas rutinas de limpieza y orden y, por el contrario, prefieres contratas una empresa de limpieza para que lleve a cabo todas estas tareas, puedes contactar con nosotros. Tenemos años de experiencia en limpieza a domicilio, comunidad de vecinos, portales… en Gipuzkoa (Donostia) y el Goierri.